miércoles, 18 de noviembre de 2015

El mundo al revés.



A raíz de lo sucedido en París estos días, llama la atención varias cosas:
-          Los terroristas que han cometido los crímenes son personas de origen extranjero, pero nacidos en Francia o Bélgica en segunda e incluso tercera generación.
-          Todos provienen de barrios de la periferia que triplican el paro y la pobreza del resto de barrios de Bruselas y/o París.
-          A pesar de ello la respuesta de Francia y aliados ha sido bombardear masivamente Raqa en Siria, donde además de los fanáticos del Isis viven 200.000 personas inocentes
-          La Unión Europea que no se doblegó en sus exigencias de austeridad cuando la gente no tenía para comer, ahora da luz verde a acabar con la austeridad para ir a la “guerra”

Yo no sé a vosotros, pero a mí me parece que no hemos entendido nada.
Llegados a este punto, ya habrá quien piense que estoy justificando a los terroristas, pero no, no los justifico, todo lo contrario.

Habría que pensar ¿Qué está fallando en este caso en Europa, para que gente originaria de otros países, en este caso árabes , ya ciudadanos franceses, belgas, alemanes, británicos , de segunda o incluso tercera generación, caigan en este fanatismo?
¿No será que ha fallado por completo las políticas preventivas de integración?

Durante estos años, con la excusa de la crisis, hemos visto como la ideología de la austeridad, nos ha impuesto eliminar todo lo que la Unión Europea a las órdenes de Alemania nos ha ordenado. ¿Y que ha sido? Pues sobre todo las políticas sociales, que han sido consideradas como gastos superfluos.
No hablo ya de las rentas mínimas para que la gente coma, que ya es lo peor de lo peor y para las que no ha habido ni la más mínima piedad ¡Había que cumplir el déficit!
Hablo también de las políticas comunitarias, con dinamización comunitaria, centros de ocio alternativo e inclusivo, alternativas sanas de ocio, facilidad de acceso a becas y ayudas para no tener que abandonar los estudios, apoyo y refuerzo en los estudios para personas que por no tener el suficiente refuerzo familiar se han visto abocados al abandono escolar, etc.
¡Todo esto fuera, es necesario cumplir el déficit, austeridad, austeridad!

Pensemos un poco, en una persona o familia en dificultad social, en situación de pobreza, que por los recortes y eliminación de esos recursos que he citado antes se ve frustrado en su deseo de mejorar en la vida. Fracasa en el colegio, porque nadie le apoyó en casa ya que sus padres estaban  10 horas fuera trabajando ,y el Centro Social donde podía haber ido a refuerzo escolar cerró por los recortes.
O se esforzó y al llegar a la universidad, no pudo continuar porque las tasas eran prohibitivas y el sistema de becas se esquilmo enormemente por los recortes, por la austeridad. O siendo un adolescente, el Centro Joven de su barrio donde se hacían multitud de talleres cerró y la única alternativa en su tiempo libre con sus amigos fue dar vueltas por la periferia. Y todo esto en un barrio que poco a poco se ha convertido en un gueto, con carencia de infraestructuras comunitarias y en el que apenas hay inversión porque hay que cumplir un déficit.
Y cuando estás ahogado por la falta de expectativas de vida, laborales, de futuro, alguien viene y te envenena la cabeza, y te hace ver que eso te pasa porque eres árabe, o como dicen en las redes sociales “un puto moro” al que piden “vuelve a tu país”, cuando resulta que tú y tus padres ya nacisteis ahí en la periferia de París, Londres, Madrid,… Y por qué será que te comes la cabeza y ese veneno que te están inoculando prende en tu cerebro y de repente consiguen volverte un fanático lleno de odio, y que decides refugiarte en alguien que te ofrece algo “supuestamente bueno” y que un buen día te pide que vacíes ese odio contra todos los que supuestamente son los culpables de tu situación; de forma que coges un cinturón de explosivos y…

Vale, vale, llámame exagerado. Sí que es verdad que esto puede ser un caso entre un millón, pero quería llamar la atención sobre las políticas europeas en general y española en particular.

Sigamos recortando servicios sociales, sigamos recortando políticas de prevención de la exclusión social, sigamos recortando en educación pública, en su calidad, en sus becas, carguémonos la dinamización comunitaria, todo eso que algunos políticos ven como derroche; y luego cuando las cosas a veces se vayan de las manos, gastémonos treinta veces  lo ahorrado en policías, bombas, cazabombarderos y más guerras. Si alguien cree que ese es el camino va bueno.

Y ahora metámonos con los que piensan como yo, y acusarnos de defender a los asesinos por pensar así, o pongamos estupideces en las redes sociales, quejándonos de la inversión en políticas sociales; si ese es el camino que queremos, apañaos vamos. Y ya de paso jaleemos el recorte de libertades en pos de la seguridad y demos el visto bueno a saltarnos, entonces sí, el déficit para financiar la mano dura.

¿Os imagináis tener un hijo toxicómano? ¿Y qué vuestra única reacción cada vez que viene “puesto” sea darle una paliza? ¿Creéis que conseguiríais algo? ¿No sería más efectivo apoyarle, hacerle reconocer su problema, ir a las causas de su problema y ponerlos en manos de especialistas? Pues si esto lo vemos claro ¿Por qué lo otro no?
En definitiva, sigamos recortando en políticas sociales, en programas de inclusión, en proyectos de prevención de la exclusión social. Sigamos recortando en educación, becas,…
Y gastémonos 30 veces más en antidisturbios, porras y bombas, ¡Vamos, todos juntos hasta el precipicio!


PD: Todo esto ha de aderezarse con temas como:

-          Cuál ha sido la política occidental en los países de medio oriente
-          A que dictadores hemos apoyado por interés económico
-          Guerrillas a las que hemos financiado, armado y luego se han vuelto contra occidente (talibanes, isis,..)
-          El negocio de venta de armas por encima de todo
-          Regímenes autoritarios y feudales, campeones en decapitaciones y crucifixiones y a los que rendimos pleitesía (Arabia Saudí)
-          Regímenes autoritarios y feudales que no respetan los derechos humanos y a los que publicitamos en nuestras camisetas deportivas (Catar, Fly Emirates)
Mézclese todo y métanse debajo de la mesa.